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Consejos útiles sobre fertilizantes
Los abonos y fertilizantes son esenciales para ayudar a nuestras plantas a crecer, fortalecerse y florecer en las mejores condiciones. Hay muchos tipos de fertilizantes, y cada situación requiere el producto adecuado para obtener los mejores resultados. Por eso te explicamos todo lo que necesitas saber sobre los fertilizantes.
¿Qué son los fertilizantes?
Los fertilizantes y abonos son productos destinados a mejorar la calidad de la tierra para aumentar su producción, es decir, fertilizar. Se componen de elementos químicos necesarios para las plantas, normalmente
- Nitrógeno (N),
- Fósforo (P)
- Potasio (K)
que fortalecen las plantas y favorecen su desarrollo y frutación, pero también pueden componerse de otros elementos como el calcio o el magnesio. Según las propiedades del suelo que queremos abonar, será más idóneo un abono u otro, por lo que es importante informarse sobre la composición de nuestra tierra y de los abonos antes de mezclarlos.
Además, los fertilizantes pueden ser orgánicos o inorgánicos (hechos a partir de materia natural o artificial).
¿Cómo se usan los fertilizantes?
Cada fertilizante tiene su método de aplicación particular. Si son sólidos-granulados, se aplican mezclándose con la tierra; si son líquidos, se ponen en la tierra o en el agua de riego; algunos se pulverizan; etc. Como cada fertilizante es único y se aplica en cantidades específicas, es importante que conozcas y sigas las instrucciones de uso.
También tienes que tener en cuenta las propiedades de la tierra y de las plantas que quieres abonar. Según el objetivo que persigas, tendrás que aplicar un fertilizante u otro: el que cumpla la función que necesitas.
Por último, debes pensar en el calendario (algunos fertilizantes se aplican sólo durante algunas épocas del año) y en la frecuencia de uso (puede ser que deban aplicarse periódicamente para obtener los resultados deseados).